Lunise Jules

"La cooperación no es uniforme en su constitución, intenciones o influencias"

Directora ejecutiva con más de 20 años de experiencia laboral en el sector de la gestión de organizaciones sin ánimo de lucro en Haití dirigiendo programas para reducir la pobreza y la desigualdad en uno de los contextos más difíciles del mundo. Experta en evaluación de programas, planificación estratégica, gestión de voluntarios y Máster en Desarrollo Económico por la Eastern University.


Cuáles son los desafíos actuales de la cooperación ?

El sector de la cooperación internacional se ha visto obligado de enfrentar enormes cambios, empezando por el de la globalización facilitada por las innovaciones tecnológicas, liberando el conocimiento, las informaciones e incluso las fronteras territoriales. El mundo se ha convertido en una gran aldea teniendo a su disposición medios y mecanismos de funcionamiento, de desplazamiento y conexiones enormes. Estos últimos han cambiado la configuración de actores de esta cooperación que se quiere todavía comprometida en las luchas contra las desigualdades sociales, la pobreza y las crisis humanitarias liadas sea al cambio climático o a la guerra.

El nuevo orden económico mundial está dominado por la nueva realidad económica que representa China y va a cambiar aún con las consecuencias de la guerra entre Rusia y Ucrania. Además, hay que tomar en cuenta que esta cooperación internacional se define ya desde hace un tiempo a través de grandes instancias multilaterales o grandes acuerdos internacionales con participación de los Estados independientes.  

En un país como Haiti, a nivel de la cooperación externa, el Estado no sólo tiene que lidiar con estas instituciones multilaterales, sino también con un sinfín de ONG que pretenden proteger a los más vulnerables y brindarles un futuro mejor. Quienes nos comprometemos con estas instituciones humanitarias y de desarrollo somos nuevos soldados que van a la guerra contra la injusticia social, la pobreza y la enfermedad en el mundo. Como cualquier guerra, esta también está impulsada y apoyada por creencias, intereses e ideologías que no son necesariamente los de las poblaciones vulnerables consideradas. En otras palabras, la cooperación no es uniforme en su constitución, intenciones o influencias.

Como piensas que deberían ser abordadas?

Estos desafíos deben ser abordados como una preocupación por todas las distracciones que puedan representar las facilidades que ofrece el contexto de la globalización, el viejo o el nuevo orden económico, con vistas a hacer frente a las barreras erigidas en el camino de la lucha contra las desigualdades sociales en todas sus formas.

La localización, por ejemplo, seguirá siendo una palabra vacía si los bienintencionados actores de la cooperación internacional no son conscientes de que ya no pueden pretender hacer cosas para los vulnerables, sino con ellos, y de que los vulnerables son el centro de nuestras intervenciones y no receptores pasivos. La preocupación por la coherencia, el compromiso con la justicia, la equidad y la compasión como brújula, y el trabajo en red son las mejores guías para afrontar los retos actuales de la cooperación.

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